Ya os hemos hablado en varias ocasiones del C1, de su comportamiento, equipamiento, precios y novedades. Hoy os traemos un reportaje sobre el motor Puretech 82 CV, la versión más potente de gasolina y pensada para dominar la ciudad.
Tres cilindros honestos
Bajo el capó de este C1 se encuentra un motor de tres cilindros en línea de 1.200 cc PureTech. Este propulsor de 82 CV y 116 Nm de par máximo se sitúa como el más potente de la gama, compuesta como única variante alternativa por el 1.0 VTi de 69 CV.
El pequeño PureTech se presenta, quizás, como la opción más recomendable después de comprobar como al VTi de 69 CV le falta un poco fuerza en según que condiciones. Éste en cambio se presenta franco, con una potencia discreta de poco más de 80 CV pero capaces de mover con mucha soltura los 860 kg de Citroën C1.
Sólo está disponible con cambio manual de 5 velocidades el cual hemos encontrado un poco corto en cuanto a relaciones. Estan pensadas básicamente para moverse por las urbes y sus alrededores pero penalizan con un motor muy subido de vueltas y ruidoso al circular a 120 km/h en autopista.
Si nos atenemos a su ficha técnica vemos como es capaz de acelerar de 0 a 100 km/h en 10 segundos y tiene una velocidad punta de 170 km/h. En cuanto al consumo logra homologar sólo 4,3 l/100 km, que en la práctica aumenta hasta los 6 litros si hacemos mucha ciudad y nos movemos por autopista a 120 km/h. Nos hemos acercado a los 4,5 litros sólo cuando hemos circulado constantes a 80-90 km/h en quinta marcha. Por su parte, expulsa unas emisiones de CO2 de 99 g/km, lo que le exime al comprador de pagar el impuesto de matriculación.
A diferencia del motor pequeño, el PureTech 82, nos ofrece mayores garantías a la hora de afrontar trayectos fuera de la urbe. Entrega la potencia de una forma bastane lineal y es por este motivo que parece que le falte algo de punch. Si queremos sacarle todo el rendimiento habrá que subir el motor de vueltas y el poco par motor que ofrece obliga en cierta medida a usar con frecuencia el cambio de marchas.
Divertido y ágil.
Si tenemos en cuenta su tamaño el C1 es un coche ideal para la ciudad. Con apenas 3,4 metros de longitud se aparca en cualquier sitio, y si además se monta la cámara de visión trasera se puede ajustar aún más en huecos muy justos sin usar la técnica del golpecito que nos dejará a la larga el parachoques bien marcado (y el cabreo del vecino si nos ve hacerlo).
Probado por las calles de Barcelona la sensación de agilidad que desprende es genial. «Zigzaguea» como un ratoncillo por las estrechas calles del Born sin apuros y los cambios de carril en las grandes avenidas se realizan en un visto y no visto.
El nivel de ruido percibido en el interior es alto, haciendo gala de un mal aislamiento del motor que además transmite demasiadas vibraciones al volante. No cuenta con sistema Stop/Start, algo incomprensible en un coche destinado para la ciudad donde nos pararemos en un semáforo aproximadamente cada 2 o 3 minutos (con un poco de suerte).
En carretera abierta no defrauda, todo lo contrario, nos ha sorprendido lo divertido que es de llevar por carretera. Las suspensiones se encuentran a medio camino entre el confort y la estabilidad, permitiendo cierto balanceo de la carrocería en curvas cerradas y un aguante constante en virajes de mayor velocidad. Eso sí, se muestran bastante secas ante cualquier roto en la carretera o si pasamos demasiado rápido los famosos badenes. Delante monta frenos de disco y detrás de tambor, una solución suficiente para las pretensiones del C1.
La dirección es el talón de Aquiles de este coche en el apartado de conducción. El volante nos parece un poco grande de diámetro (es el mismo para los 3 modelos hermanos) y su tacto deja serias dudas. El nivel de asistencia es bueno para la ciudad pero resulta muy incómodo en carretera. El guiado no es demasiado preciso, es lento de respuesta y en autopista obliga a corregir más de la cuenta la trayectoria.
Buen nivel de equipamiento.
Si tenemos en cuenta el nivel de personalización, el C1 no le llega ni a la suela de los zapatos al Aygo. Mientras que al japonés se le puede cambiar hasta el color de la X del frontal, el C1 únicamente propone 7 colores para la carrocería bastante discretos, dos tapizados para los asientos (tela o cuero), un kit para pintar de blanco detalles como los embellecedores plásticos de la base del cambio, de la consola central y de la salida de los aireadores e instalar las carcasas de los retrovisores cromadas.
El acabado Shine, el tope de gama para que nos entendamos, incluye un completo equipamiento de serie al que apenas hace falta añadir ningún accesorio adicional. De serie encontramos la regulación en altura del asiento del conductor, el cierre centralizado, los elevalunas eléctricos, el volante de cuero, el sistema Mirror Screen con pantalla táctil de 7 pulgadas y Bluetooth, limitador de velocidad, luces diurnas LED, llantas de aleación de 15 pulgadas, retrovisores exteriores regulables eléctricamente y térmicos, tiradores de las puertas del mismo color que la carrocería, marcos de las ventanillas cromados y kit antipinchazo.
En cuanto a sistemas de seguridad cuenta con 6 airbags, ABS, Asistente a la frenada de emergencia, ESP, ASR y Hill Assist (ayuda al arranque en pendiente).
Nuestra unidad de pruebas además contaba con algunos elementos que se facturan aparte y que acaban incrementando ligeramente el precio inicial de 13.150 euros. A continuación os facilitamos los extras y sus respectivos precios que, sumados, dejan esta unidad en unos interesantes 15.555 : Color Gris Gallum Metalizado para la carrocería (350 ), asientos de cuero negro (900 ), asientos delanteros calefactables (200 ), retrovisores exteriores cromados (75 ), paquete Easy Auto (550 ) que incluye acceso y arranque manos libres y climatizador automático, cámara de visión trasera (250 ) y rueda de repuesto de tipo galleta (80 ).
Uno de los más económicos del mercado.
El nuevo Citroën C1 ofrece una política de precios acorde con lo que realmente ofrece. Se trata de un coche sencillo para cuatro ocupantes y, eso sí, con poco maletero. Sin embargo como acabamos de ver su nivel de equipamiento es bastante bueno, incluso superior al de alguno de sus rivales, y ofrece dos variantes mecánicas de gasolina perfectas para este tipo de coches. En la versión de 3 puertas el precio arranca en 10.250 euros y en 10.550 para el 5 puertas.
Fuente: Coches.net